Ana Mariela Paredes Fischer
María Gabriela Corrales Pimentel
María Ayumari De León
Marianela Acosta Linares
A través de
estrategias de coaching, se puede acompañar a un individuo que desde sus propias
experiencias tenga la oportunidad
de descubrir que cada ser tiene
la capacidad de lograr todo lo que se planteé,
ya que las mejores respuestas a nuestras
interrogantes solo la podemos encontrar en ese mundo mágico que es nuestra
mente, mediante una reflexión profunda
acerca de nuestros patrones mentales y creencias.
No importa durante cuánto tiempo hayamos
seguido un modelo negativo, hoy podemos
empezar a cambiar, descubriendo todas esas barreras limitadoras que no nos
permiten avanzar. “¡Recuerde, en su mente no piensa nadie más que usted!. Usted
es el poder y la autoridad en su mundo para
realizar cambios importantes, revisar creencias y cambiarlas acorde a nuestros
deseos.
Ahora bien, todo Coach debe empezar a generar
una sintonía idónea, para acompañar a esa persona que desea descubrir cómo llegar al estado
deseado. Para lograrlo es primordial manejar el Rapport.
Pero, ¿qué es exactamente el
Rapport? El término deriva del antiguo verbo francés "rapporter", que
literalmente significa dar algo a cambio. Trasladado a las relaciones
interpersonales, esto se encarna en una conexión que hace que ambos
intervinientes den y reciban lo mismo. El profesor Robert Rosenthal y su colega
Linda Tickle-Degnan publicaron un artículo que describía los tres ingredientes
esenciales del rapport: atención mutua, positividad mutua y coordinación o
sincronización. Si falta alguno de estos tres elementos puede que las personas
se lleven bien, pero no habrá esta conexión.
Esta técnica tiene por objeto, crear ese ambiente de
confianza y cooperación mutua para entablar una comunicación donde no haya
juicios, distorsiones o malos entendidos, sino una escucha sana.
El rapport nos permite romper con las barreras que nos paralizan y
ayuda a que no nos quedemos en medio de la pista de baile sin hacer
ningún movimiento cuando ya la música está echada a andar. Por ello debemos
aplicarla de ambas partes para disolver y resolver las diferentes situaciones de sentirnos mal o incómodos; ya
sea por timidez, apatía o que nos sentimos fuera de lugar.
Ciertamente ya sabemos hacer
rapport inconscientemente en nuestra vida diaria. Se da de forma espontánea
entre amigos, pareja, compañeros de trabajo, en casa con la familia y también con alguien que acabamos de
conocer; lo creamos aportando la sensación de confianza,
cooperación, beneficios y una plena comunicación, es allí donde sin saberlo
aplicamos la escucha activa, herramienta
básica para hacer Rapport.
Si solo el 7% de lo que
comunicamos depende de lo que decimos, un 38% depende del tono de las palabras
y el 55% se basa en el lenguaje corporal, es aquí donde el coach usa este
conocimiento, para identificar los canales mediante los cuales las personas
perciben el mundo y poder aplicar la observación plena y escucha activa, para lograr crear una
conexión fluida y cómoda.
¿Cómo
obtener la conquista?
Como coach es necesario
aplicar ciertas técnicas de Rapport para conquistar a la persona deseada:
Observación:
La postura que tome nuestro
cuerpo al momento de conversar tiene más significado de lo que podemos pensar,
de aquí depende la facilidad para conquistar a alguien y mejorar nuestra
calidad de expresión, obteniendo un entendimiento más sencillo hacia la otra
persona.
Mirar con atención las
posturas de la persona a conquistar, movimiento de sus brazos, sus manos, cruce
de las piernas, modo de pararse, sentarse, como mueve la boca, los ojos,
movimiento de su cabeza, observar los gestos de seducción, sonreír pícaramente,
tocarse y arreglarse el cabello, colocar las manos en la cintura, ondular las
caderas, cruzar las piernas igual a la persona que nos atrae, exhibir las muñecas,
observar la sonrisa que expresa alegría, felicidad, simpatía, agrado, (a veces
disimula una situación incómoda).
El contacto visual puede
decir mucho, mostrando seguridad, confianza o nerviosismo, además la cantidad
de veces que miramos a la otra persona que vamos a conquistar, demuestra nuestro
interés. La mirada expresa las emociones.
Lenguaje
corporal: El lenguaje no verbal es un espejo de cómo nos sentimos
por dentro. Si observamos detalladamente a nuestro interlocutor y reflejamos
con elegancia y sutileza los gestos de la otra persona, estamos sintonizando
emociones.
Debemos copiar el lenguaje
corporal de una manera muy sutil. Se necesita equilibrio y armonía para no
quedar en evidencia al momento de mover nuestro cuerpo.
Escuchar:
Aplicar la escucha activa;
escuchar con interés sus palabras, temas, frases, velocidad y tonos de voz, para poder apreciar a nuestro interlocutor. Aquí
debemos copiar el tono, ritmo y volumen de voz. Usaremos la misma manera de hablar, construiremos las mismas
frases y acompasaremos nuestra respiración a la suya.
Lenguaje
verbal: El para-lenguaje es la musicalidad con la que las
personas hablamos. Dicha musicalidad, será diferente dependiendo de las
emociones que estamos sintiendo en el momento en que nos comunicamos. Si
prestamos atención a la velocidad, al volumen, a la vocalización, al énfasis y
ritmo de nuestro interlocutor y nos adaptamos en lo posible, estamos
acompasando emociones y creando sintonía con nuestro interlocutor.
Aquí es necesario
identificar el nivel neurológico de nuestro receptor, descubriendo si es auditivo, visual o kinestésico.
Las personas auditivas te
dirán: oye, escucha, esto me suena…, etc. piensan a través de los sonidos,
hablan pausado, dan mucha información y son reflexivos. Representan el 20% de
la población.
Una persona visual al hablar
contigo te dirá: mira, fíjate, observa, etc. Piensa a través de las imágenes y
hace cosas rápidamente. No se acerca mucho a su interlocutor ya que necesita
ver sus movimientos claramente. Representa el 35% de la población.
La persona kinestésica
siempre te dirá frases como: siento que…, me siento cómodo…, tengo la sensación
de…etc., es sensible al tacto, al olfato
y al gusto. Esta persona hace las cosas despacio y se acerca mucho al hablar
con las personas. Representa el 45% de la población.
Acompasar:
Este es el momento de hacer
de espejo de los 2 pasos anteriores (observar y escuchar), aquí adoptamos
conscientemente el lenguaje verbal y no verbal, su tono y velocidad de la voz,
su postura corporal de una manera sencilla, respetuosa, delicada, sutil, logrando una empatía total. Esta técnica bien
utilizada puede lograr infinidad de utilidades, nos sirve desde romper el hielo,
hasta lograr tener influencia sobre la gente y hacer que puedan expresar
libremente aquello que piensan y desean.
Comprobación:
Una vez realizados todos los
pasos anteriores, debemos verificar si el Rapport fue logrado. Se puede comprobar realizando algún gesto y
cambiando de postura. Si el interlocutor realiza un gesto similar quiere decir
que lograste crear la conexión y sintonía. De haber algún cambio y la
conversación o la situación se vuelve tensa, solamente comienza de nuevo los
pasos hasta logar lo deseado.
Vale destacar que cuando
alguien te gusta, adoptas intuitivamente maneras de ser de ella o de él. Pasa
con la familia y los amigos, donde usamos el mismo lenguaje. Si queremos
conquistar a alguien aplicando Rapport,
seduciremos muy sutilmente, utilizado como una forma de sintonía para atraer a
las persona hacia un nuevo estado emocional y que se sienta confortable.
En este proceso de adoptar
el comportamiento de la persona con la cual nos queremos comunicar, se logra la
sintonía o empatía ya que el inconsciente lo está captando. De alguna manera
logramos meternos en los zapatos del otro, entenderlo y que él nos entienda.
Si conseguimos sintonizar,
lograremos establecer una comunicación centro a centro, es decir del
inconsciente al inconsciente. Esto nos permitirá lograr una genuina
identificación con el otro, facilitará la comunicación y la comprensión.
Alertas
en el proceso de generar Rapport:
·
Muchas veces por el afán de generar química o
Rapport, deseamos ser gentiles y amables; más sin embargo, no podemos mostrar
un estado de alegría muy grande ya que la persona que quiere decirnos qué le acontece, trae consigo
una preocupación.
·
Otro error, mantener el Rapport también
significa que el coach está abierto a
sus sugestiones y debe cuidar la
posibilidad de caer en un estado de tristeza, preocupación, melancolía, etc,
como el de la otra persona.
·
Si la persona sintiéndose cómoda, explica su
situación una y otra vez, y quiere repetir de nuevo y el coach se lo permite,
cae en el error de no avanzar, por no liderar o direccionar la sesión.
Es así como, crear Rapport para un coach es fundamental si queremos
sincronizarnos con nuestro interlocutor puesto que esta sincronización marca
muchas veces la diferencia en la calidad de la comunicación. Esta es una forma
poderosa de ponerse en los zapatos del otro.
El coach debe generar esa sintonía en armonía
perfecta, de tal manera que construir Rapport sea algo automático.
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