sábado, 27 de junio de 2015

ESCUCHA ACTIVA: EL ARTE DE ESCUCHAR CON LOS CINCO SENTIDOS

 Mariany Ledezma
Romer Molina
Danela Pelucarte
Juan Lara

LA ESCUCHA ACTIVA, una fascinante herramienta que nos invita a poner en acción todos nuestros sentidos con la finalidad de poder captar completamente y comprender adecuadamente el mensaje que se nos transmite, dando como resultado una verdadera comunicación efectiva.

Desde nuestros primeros años de vida nos están invitando a escuchar para poder comunicarnos adecuadamente, a través de las normas del buen hablante  y buen oyente, pero jamás nos explicaron que la intención constaba de darle valor  justo, de respetar y  escuchar las ideas de las otras personas, con la finalidad de poder analizar, entender  y reconocer las ideas del comunicador, es muy común conseguirnos personas arrolladoras que no escuchan y al parecer su opinión es la que tiene peso sin importar la del prójimo, a parte que de lo egoísta y falta de respeto que resulta, pierde la verdadera esencia  de la comunicación, limitándola a su pequeño círculo de vida, restringiendo el abanico de opciones que pueden obtenerse de este maravilloso planeta. El escuchar nos permite establecer una relación, un canal de  confianza, nos permite ver sin límites las opciones que se nos presentan.

Actualmente la escucha activa se ha convertido en la mano derecha de muchos profesionales, como coach, psicólogos, vendedores, médicos, terapeutas, gerentes, etc., en donde cada uno de ellos a través de esta valiosa herramienta  tiene la capacidad de descubrir eficazmente las oportunidades o posibles soluciones que se presentan día a día y encaminarse hacia el verdadero camino del éxito.

Para lograr ESCUCHAR ACTIVAMENTE,  es indispensable aprender a vivir en el aquí y en el ahora, de instante en instante, para poder afinar los sentidos, durante la existencia surgen cuantiosas oportunidades que solo pueden ser tomadas por aquel que vive en el presente, la vida se compone de detalles.

De este modo se debe tener en cuenta que hay que vivir en plena atención, en una constante y continua auto-observación de nosotros mismos, hacernos conscientes de lo que pensamos, sentimos y el cómo actuamos; hay que dejar de soñar con los eventos del pasado y con un futuro incierto, es necesario dejar de  vivir fascinados con todas las tareas que la vida coloca para aprender (comúnmente llamados problemas).

Muchos accidentes ocasionados por factores humanos ocurren por una ceguera psicológica del individuo, debido a la falta de atención en lo que hace. “Órgano que no se usa se atrofia”, los sentidos deben ser ejercitados a través de una vida plenamente vivida: a la hora de comer, que sea únicamente a comer, saborear los alimentos; al bañarse, sentir el agua; al hacer cualquier actividad, disfrutar de la misma; pero sin meter de por medio la mente.

Todo es cuestión de tener una percepción perenne del presente que se vive de segundo a segundo, la forma más elevada de pensar es no pensar. Ejemplo: una persona que va caminando por la calle y no oye el saludo de un amigo que le pasa a su lado, porque en ese momento preciso se decía en la mente: por la tarde pagaré el seguro, mañana viene el contador…

Uno de los aspectos más importantes en la escucha activa, podemos considerar el tener un silencio completo (verbal y mental) y estar realmente en el momento presente cuando nuestro interlocutor nos habla. Vivir en el presente mientras la persona nos habla no solo es muestra de una buena educación y respeto. Sino que nos garantiza un mecanismo eficiente para poder conectarnos en lo que nos dice nuestro interlocutor, ya que así nos permitirá conectarnos no solo con sus palabras, sino sus sentimientos, preocupaciones, deseos por ser escuchado.

Existe una definición de estar en el momento presente, sin embargo llevarlo a la práctica resulta un tema complejo; ya que en muchas ocasiones nuestra mente está generando ideas, prejuicios, conclusiones, en fin una serie de razonamientos de lo que nuestro interlocutor dice.

En muchos casos nuestra mente puede estar divagando con acontecimientos del pasado o eventos del futuro, no permitiéndonos contemplar el arte maravilloso de escuchar y así aprovechar cada palabra, expresión no verbal, gestos que este nos manifieste y así movernos en “su mapa”, el porque está allí y de qué manera seguir avanzando positivamente en el acompañamiento.

Para poder ESCUCHAR ACTIVAMENTE,  es preciso poner alerta todos nuestros sentidos, con nuestro interlocutor, con la finalidad de no solo escuchar el mensaje verbal, sino el no verbal, el cual también tiene mucho contenido de importancia.
Es muy importante estar conscientes de muchos de los errores que cometemos cuando estamos escuchando por ejemplo:

·         No prestar atención al tono de voz, El tono de voz en un elemento que aporta un gran contenido al mensaje, ya que nos va proporcionar información muy valiosa sobre las emociones que está teniendo la persona cuando habla.
·       Meterse en la conversación de la otra persona, uniendo lo que dice el interlocutor con algo que nos ha pasado, o nos pasa a nosotros en nuestra vida.  Con el “yo…” o “a mí…”. O terminando de decir las frases que el interlocutor está transmitiendo.
·       Las posturas incorrectas a la hora de escuchar, una buena gestión postural implica mirar a los ojos, asentir con frecuencia, sonreír de vez en cuando al hablar y cuando nos hablan….
·   Distracciones con elementos del entorno, una buena escucha activa implica la continuidad con el tema de nuestro interlocutor y con la mirada centrada en él.
·       Realizar respuestas cortas o cortantes, es contrario a la escucha activa. significaría meternos en la conversación de forma brusca incluso a veces, interrumpiendo al interlocutor, adelantándonos a lo que va a decir. Así como realizar preguntas cerradas que impiden que nuestro interlocutor desarrolle sus ideas.
·         Los cambios bruscos de temas, Desviar repentinamente de tema para comenzar con otro que no tiene nada que ver.
·    Prejuzgar el mensaje de nuestro interlocutor, Interpretar su comunicado desde nuestro punto de vista, en vez de hacerlo desde su punto de vista. Dirigir la conversación hacia nuestros intereses, en vez de dejar que nuestro interlocutor nos revele sus pensamientos.
·        Pensar qué vamos a decir cuando nos toque hablar, en vez de concentrarnos en el discurso de nuestro interlocutor.
·     Reaccionar ante lo que creemos que son ataques emocionales por parte de nuestro interlocutor, tomando a lo personal lo que nos dicen.
·         Realizar una escucha selectiva, prestando atención sólo a las partes del mensaje que nos resultan interesantes.
·         Sermonear, mandar o reprochar a nuestro interlocutor.
·    Dar lecciones o aconsejar, aludiendo a nuestra experiencia para indicar lo que es bueno o malo.
·         Desaprobar, cuestionar o quitar la razón al otro.
·         Ironizar sobre el tema planteado.
·         Subestimar el mensaje que nos están transmitiendo.
·         Quitar importancia, a los sentimientos de la otra persona con expresiones como “no te preocupes por esa tontería”, “no te pongas así”, etc.
·         Contar “nuestra anécdota” cuando el otro está aún hablando.
·    Caer en el “síndrome del experto”, saber lo que debemos contestar cuando la otra persona no ha comenzado a hablar.

La práctica de ESCUCHA ACTIVA, se lleva a cabo a través de la OBSERVACIÓN, estando atentos a todo lo que nos emite nuestro interlocutor, gestos, sentimientos que expresa señales que nos indicaran cuando podemos tomar la palabra,  de esta manera logramos obtener la mayor información posible que nos den un clara visión sobre lo que él quiere decir y a través de la EXPRESIÓN, nuestro interlocutor debe captar por nuestra actitud que le estamos prestando atención. Es importante mantener el contacto visual y asentir con movimientos de cabeza. También debemos acompañar nuestros gestos con expresiones verbales: “claro, entiendo”, “ya veo”, “ah-ah”…

Existen varios elementos que podemos utilizar para demostrarle a nuestro hablante que realmente lo estamos escuchando como: Mirarlo a los ojos, acercarnos físicamente, tener una postura atenta, expresiones faciales demuestren atención (“interés”), movimientos de cabeza y/o manos en sintonía con el mensaje que nos trasmiten, reflejar en nuestro rostro la emoción del otro, verbalmente: Emitiendo palabras que demuestren nuestra atención y que estamos escuchando y entendiendo el mensaje, haciendo preguntas, repitiendo ocasionalmente los aspectos más destacados, recapitulando/resumiendo lo dicho.

Guiándonos en el correcto auto-conocimiento el estar atento con los cincos sentidos LA ESCUCHA ACTIVA, es una de las herramientas indispensable del coaching, para estar en la capacidad de ayudar en el proceso de cambio al coachado.

Recordando en primer caso que la función del coach es la labor de dar acompañamiento a su coachado para que transite el camino de su situación presente a la situación deseada y esto solo se alcanzará si realmente identificamos su estado actual.

Según la siguiente cita de Jean de la Bruyere: “Es una enorme desgracia no tener talento para hablar bien, ni la sabiduría necesaria para cerrar la boca.” Nos muestra como escuchar resulta un arte que no todos estemos dispuesto a seguir. Una vez identificado el estado actual de nuestro coachado, podremos establecer la conexión y centrarnos en lo que desea y como conseguirlo.

Partiendo de lo que él nos comunique podremos identificar cuál es su sistema de creencias limitantes, para a partir de allí realizar preguntas poderosas y este pueda darse cuenta de los cambios que debe realizar y las acciones a tomar. Ya que la acción es lo único que le permitirá alcanzar sus objetivos.

Tener en cuenta que en cada sección del coaching tendremos en frente de nosotros la misma persona con circunstancias diferentes (por eso siempre tener en cuenta que puede atrasarse, permanecer o evolucionar en el proceso), y esto lo sabremos solo si escuchamos activamente sin “suponer” que él ha evolucionado. Sus gestos más allá de las palabras nos servirán de indicadores de cómo él/ella se expresa y que realmente nos quiere decir, por ejemplo si sus palabras nos indican “estoy muy bien en el área familiar” y sus expresiones son de tristeza (parpados superior caído, perdida de enfoque, extremos de labios caen ligeramente, entre otros) son quizás algunos indicadores más fuertes que sus palabras.

Al ESCUCHAR ACTIVAMENTE, logramos un verdadero clima de confianza para que los demás puedan ser sinceros con nosotros, la persona que habla se siente respetada y valorada, como también logramos el respeto hacia nosotros mismos, se logra tener efectos tranquilizantes y se facilita que se eliminen tensiones favoreciendo así una relación positiva con el interlocutor, llegando al fondo del problema y encaminándonos hacia el éxito. La ESCUCHA ACTIVA, debería ser más que una herramienta utilizada por profesionales para entender a los demás y encontrar soluciones a dificultades, debería formar parte del día a día de nuestras vidas, así como respirar, caminar, hablar, oír, si nos escucháramos más, tendríamos un mundo más respetado con menos problemas, mas valores y personas más FELICES. 


jueves, 25 de junio de 2015

¿Tu Sombra te limita?

Flor Buitriago
Freddy Reyes
Ana Hernández
Franklin Pulgar

Como seres humanos en muchas ocasiones observamos el mundo y la realidad de una forma particular, esto se da según las experiencias y vivencias en cada situación, de aquí se desprenden la creencias, formas particulares de observar el mundo, las situaciones y personas, pero ¿qué pasa cuando tenemos miedo? de actuar, de tomar decisiones, de hablar y caminar por la vida, ¿te has parado a observarte alguna vez y notar que al momento de tomar decisiones intimidantes o de solo pensarlas, hablas contigo mismo?, ¿una extraña voz en tu mente discutiendo sobre el SI o él NO se debe llevar a cabo una actividad, una voz que reprocha o se expresa constantemente?

Encontramos entonces que el psicólogo C.G. Jung (1902) hablo de la sombra del ser. Es así que existe en nuestro interior una fuerza limitadora que más allá de ser una contraparte, somos nosotros mismos y estaría formada por el conjunto de las frustraciones, experiencias vergonzosas, dolorosas, temores, inseguridades, y creencias, que se alojan en lo inconsciente del ser humano y con los años va ganando fuerza y forma parte fundamental de nosotros, obsérvalo desde esta perspectiva, dos cara de una misma moneda, eres LUZ y SOMBRA.

La luz formada por todo aquello positivo que está dentro de nuestro interior, el conjunto de valores y moral de vida, que nos hace ser protocolares y respetuosos ante la sociedad, pero que también llevan consigo el acumulado de sueños, anhelos y acciones que hacemos con completa libertad y juicio. Y la sombra está formada por todo lo negativo de la personalidad del yo, el cual, no suele estar en condiciones de asumir a nivel personal la carga de todo lo reprimido, tenemos la percepción que la mantenemos bajo control, pero generalmente es ella la que manda y e impone las creencias que limitan la acción, en consecuencia es un freno de nuestra auténtica forma de ser y de sentir. 

Así mismo, el ser humano observa el mundo y todo lo negativo que está en contra de los ideales y creencias lo llama el “mal” un mal anónimo que existe, pero que no sabe de dónde viene, ahora bien ¿te has puesto a pensar quizás que todas esas representaciones negativas del mundo provienen de y salen de tu sombra?. Todo lo que el ser humano rechaza pasa a su sombra, que es la suma de todo lo que él no quiere, y este cúmulo de experiencias negativas va creciendo y al mismo tiempo limitándote, pero cada individuo, debe ocuparse en forma muy especial de estos aspectos, ya que cuando rechaza en su interior.

Ahora bien para salir de este estado lo primero es tomar en cuenta, que debemos observar nuestros temores, ¿que nos limita? Es aceptando la sombra y no rechazándola que podemos identificar las creencias que nos limitan que viven agazapadas en nuestra sombra y de esta manera se activa el potencial de desarrollo que antes no fluía, se dará paso a una manifestación positiva total en todos los niveles de la vida de la persona.

Las creencias son generalizaciones que hacemos a partir de la experiencia propia, considerando también la influencia de factores externos y el entorno social,  encontrando: la cultura, las costumbres, los hábitos, los grupos de trabajo, las amistades, las experiencias pasadas, los cuentos y las anécdotas de terceras personas, entre otros elementos, que determinan el significado que le damos a los acontecimientos de nuestro entorno, permitiendo filtrar nuestra percepción de la realidad; acentuando que las mismas creencias marcan en el tiempo diferencias en el comportamiento humano.

La etimología de la palabra creencias procede del latin “Credere” que significa creer y el sufijo “entia” que se traduce a cualidad de un agente, si integras ambas palabras se obtiene: creer en la cualidad de un agente, de allí surge que la creencia es la idea que se considera verdadera; pero NO es una verdad real, no es un hecho científico comprobado.
Es por esto que cuando las experiencias son o fueron negativas, difíciles o complicadas, las personas suelen construir creencias limitadas y pueden llegar a desanimarse, desorientarse, deprimirse e incluso pueden convertirse en obstáculos, o en hechos imposibles, inalcanzables o increíbles, y así muchas de éstas creencias limitantes se instalan en las mentes de las personas y  sin darse cuenta, comienzan a percibirlas como verdades absolutas cuando son solo filtros subjetivos de la experiencia vivida.

La manera más sencilla de identificar creencias es el lenguaje utilizado a diario, ya que en el tiempo van adaptándose a decir frases limitantes como: “Yo soy malo para…” “Yo quiero pero...” “Quisiera ser tal cosa, pero me han dicho…” “No puedo hacer esto porque…” “No soy apto para…” “Si fracaso seré el hazme reír de todos…” “¡No hago nada bien!”… “¿Y si lo hago mal?”. Cuando se trata de un NO PUEDO, estamos en presencia de una creencia limitante que paraliza y no deja seguir, a diferencia de SI PUEDO, es una frase que va más allá, que no se conforma con un solo intento, que demuestra que si hay capacidad para lograr un objetivo, que permitirá cumplir una meta presente o futura.

Del mismo modo una persona que crea que el mundo es una jungla, se comporta diferente a quien cree que el mundo está lleno de oportunidades, es tan sencillo como el que ve a diario todas sus dificultades, y el que a pesar de ellas ve las enseñanzas que obtiene de cada una. Las personas pueden llegar a incapacitarse a partir de sus creencias limitantes, mecanismo que debe modificarse para poder avanzar, por lo tanto lo más importante es identificar las creencias que no son funcionales, para empezar a sustituirlas por creencias, frases y herramientas positivas que permitan lograr los objetivos trazados, recordando que si hay tantas creencias como personas, no existe una verdad, sino diferentes formas de interpretar y según la interpretación se va creando la idea mental.

Cabe destacar, que el ser humano es un ser social por su capacidad de relacionarse con otros y establecer de ese modo pautas para su mejor convivencia con los demás y que esto le permita llevar una vida armoniosa entre las personas y el ambiente que lo rodea, día tras día va recolectando nuevos conocimientos experiencias, anécdotas saberes, entre otros, que lo llevan a formar su propio estilo de vida que más allá de experiencias vividas o conocimientos adquiridos hacen que la persona refleje su propia personalidad, carácter y en definitiva muestren la persona que es.

En este ir y venir de la vida se encuentran las creencias que se van formando con el pasar del tiempo por vivencias propias de la persona por momentos o acontecimientos  vividos  estos pudiendo ser  agradables o no tan gratos pero todas estas experiencias siempre llevan a la persona a ver las cosas de una perspectiva  distinta que puede ser con temor a volver a enfrentar o por el contrario con más herramientas para saber que no tiene que hacer para poder alcanzar lo deseado.

También se nos presentan las creencias externas que nacen por reflejos de lo vividos por otra persona estas creencias por lo general suelen limitarnos mucho más, porque en el mayor de los casos ni siquiera nos atrevemos a desafiar y vivirlas por nosotros mismos sino que nos quedamos con los resultados adquiridos por la experiencia del otro. Es muy común que estas experiencias pasadas de vida marquen nuestro presente y futuro ya queda de parte nuestra si dejamos que influyan positiva o negativamente en nosotros y en las acciones que tomaremos la próxima vez que se nos presente en el camino.

Los seres humanos estamos tan envueltos por tantas creencia propias y ajenas que esto nos lleva muchas veces a dejar de hacer y vivir momentos que lo más seguro sean de gran felicidad para nosotros mismo como el simple hecho de decir “si hoy ríes mañana lloras” o “sin dolor no hay alegría” estas son frases que no dicen nada pero a la vez dicen mucho y llevan a cuestionarme si en realidad son ciertas o no pero a la final la verdad es una sola y los caminos para llegar a ella son muchos pero cada quien tiene las herramientas y destrezas para formar su propia vida basada en la experiencia personales ya que estas nos darán nuevas y fabulosos momentos de vida que después podemos compartir con los demás pero cuidando siempre que nuestra propia experiencia no se vuelva una creencia para los otros sino simplemente un ejemplo de cómo lograr vivir la de ellos mismos.

Por este motivo cuando nos encontremos en una conversación de un tema del cual ya hayamos tenido experiencia y en el cual emerjan varias opiniones encontradas  es más recomendable decir “puedes creer o hacer lo que quieras”, suena un poco brusco y directo y capaz no lo vean bien pero en ese momento le estas dando la libertad plena de tomar su propia decisión y decidir si vivir su propia experiencia o quedarse con las experiencias, creencias y resultados del otro.

La vida no se trata de creer o no creer en experiencias de otros, de visualizar el futuro con los ojos de los demás, de experimentar con los sentidos del otro, hay que aventurase en ese camino maravilloso, en la gran travesía de vivir, a veces nuestra sombra limitante está compuesta de creencias hasta de nuestra propia familia, como aquel famoso relato del “pescado horneado”, en donde un hijo le pregunta a su madre que porque cada vez que horneaba el pescado, antes de meterlo al horno le cortaba la cola, y la respuesta de su madre fue, que así era que lo hacia su abuela, el niño fue hasta donde su abuela, y en ella encontró la misma referencia pero de su bisabuela, tal fue la curiosidad del niño que fue hasta donde su bisabuela, y la respuesta de ella fue, que ella le cortaba la cola al pescado porque su horno era muy pequeño, ¡Pero si en la actualidad hay hornos grandes!, ¿Por qué cortarle la cola si yo tengo un horno donde cabe perfectamente?, una creencia que por muy tonta que pareciese fue el trascurrir de una generación tras otra.

Y es allí donde cabe perfectamente estas preguntas ¿Hasta cuándo tu sombra te limitara por creencias que otros han depositado en ti?, ¿Tendrás la valentía de decir SI PUEDO? Y entonces en el momento en el que comiences a cambiar esas frases negativas por frases positivas tu vida tomara otro sentido. Cambia el “Yo soy malo para…” por un “Yo soy bueno haciendo esto”, no agregues un pero a tus necesidades “Yo quiero pero hoy no puedo hacerlo...”  cámbialo por un “Yo quiero y lo haré en la tarde de hoy…” No saques conclusiones por lo que otros han vivido “Quisiera ser tal cosa, pero me han dicho…” aprende a correr riesgos, Haré esto y aprenderé de la experiencia obtenida” Si emprendes algo nuevo en la vida, no lo comiences con negativismo, “Si fracaso seré el hazme reír de todos…” “¿Y si lo hago mal?”, el que comienza una batalla ya está derrotado cuando desde el principio piensa que ya ha perdido, piensa mejor Haré esto y tendré éxito”.

Cuán importante es que nosotros confiemos en nosotros mismos, y que a pesar del “mal tiempo, buena cara” porque ninguna experiencia es negativa, por muy mala que nos parezca, de todas obtenemos aprendizaje y cada una de ellas es la que nos hace madurar, crecer y nos llenan de sabiduría, el sabio no es sabio porque nunca le paso nada, el sabio es sabio porque ha pasado por todo, o casi todo.

Hay que disminuir esa sobra limitante con frases poderosas que contengan un SI PUEDO, y un LO HARÉ, para que podamos experimentar las maravillas de la vida. “Entrar en la oscuridad con una luz sólo nos permite conocer la luz.

Para conocer la oscuridad hay que ir a oscuras. Ve sin ver y descubre que la oscuridad también tiene flores y canta y puede ser hollada por pies oscuros y por oscuras alas.” C.G. Jung (1903).

martes, 23 de junio de 2015

UNA MIRADA AL COACHING EDUCATIVO

Maria Auxiliadora Vásquez
Laura Franco
Ana Rita Gutiérrez
Ana Cristina Mendoza
Brigitte Rodríguez

 En la sociedad del siglo XXI, era del conocimiento, de los avances tecnológicos, de las nuevas ideas, en la cual nuestros estudiantes, cada vez más, se hacen  capaces de aprender por sí solos, lo que convierte la práctica docente en una tarea más difícil, siendo así, cabe preguntarse, ¿cuál es el papel que jugaremos los docentes en esta situación?
Al sistema educativo le urge ir a la vanguardia de los cambios acelerados con los que viven los estudiantes, por eso el abordaje del coaching en la docencia tiene una doble vertiente en cuanto al aprendizaje. La del docente, en relación a las técnicas de desarrollo personal para mejorar sus propias competencias, habilidades y actitudes que le aporten mayor calidad de vida y sobre todo la satisfacción en su quehacer. Por otra parte,  la mejor manera de acompañar a los estudiantes en su proceso  de aprendizaje, que para los docentes inmersos en el coaching, es el  manejo de las características esenciales, de tal manera que, puedan facilitarles la formación en las habilidades y conocimientos que ellos requieren.

La adquisición y/o reforzamiento de habilidades personales, enmarcadas en la inteligencia emocional ayudarán a establecer y construir de manera adecuada la relación del docente con sus estudiantes y entre ellos, partiendo del hecho de que el coaching es el arte de facilitar cambios en sí mismo y en los demás.

Los Docentes al asumir  esta metodología se sienten más motivados, resuelven mejor los conflictos, amplían sus conocimientos y la capacidad de auto gestionar; muestran de forma más efectiva los procesos de enseñanza y aprendizaje, al desarrollar y acompañar la mejora en la calidad del rendimiento de los estudiantes, a través del darse cuenta de su responsabilidad y viviendo las acciones  que finalmente modificarán su contexto de acción.
Podemos decir que el  docente coach motiva, anima, escucha y sobre todo acompaña al estudiante a convertirse en protagonista de sus decisiones hacia la acción para conseguir los objetivos fijados.

Para esto se hace necesaria la empatía, una relación de confianza mutua y de comprensión, el establecimiento de una comunicación libre de juicios, distorsiones o malos entendidos, con el objetivo de tener una escucha sana. En la educación, el rapport, la sintonía o empatía es esencial para establecer una atmósfera de confianza y participación, donde el estudiante en proceso de formación, pueda entregarse libremente al proceso educativo asertivo y efectivo que garantice un mayor aprendizaje para el logro de objetivos planteados, teniendo como propósito incrementar las opciones, ya que un individuo con más alternativas tiene el control.

El Rapport como herramienta de comunicación esencial que crea sintonía y conexión con la otra persona, permite al docente tomar el liderazgo  guiando a sus estudiantes, como dice la P.N.L, hacia un estado de plenitud de recursos personales, haciendo que la persona se sienta entendida, a través de una comunicación, principalmente no verbal, que le ayude a considerar que ambos tienen la misma visión del mundo. El Rapport ayuda a crear  un entorno que maximiza las oportunidades de indagar, experimentar y hacer consciente el propio aprendizaje.

En el dinamismo de aprender, la  comunicación es esencial y si se ha logrado establecer el rapport, el proceso de adquisición y la eficacia de las acciones que se tomen para cuestionar, ampliar y adquirir nuevos conocimientos, solo  dependerán entonces, de la calidad de las preguntas que se planteen.

Considerando que las preguntas pueden servir para que el coaching y en este caso el docente recabe información y se haga una idea de la situación , pueda profundizar en las ideas y sentimientos de sus estudiantes, para conocerlos mejor e indague qué quieren, por qué lo quieren y qué les impide lograrlo, dentro del marco de sus creencias y valores De allí que el Docente debe formular las preguntas, de tal manera que, el mensaje llegue bien al receptor, por eso debe ser como señala Abou: corta, clara, precisa y adaptada.

Las preguntas potenciadoras requieren de la escucha profunda a la respuesta para que al generar otra pregunta o metapregunta, esta sea realmente desde el acompasamiento y calibración de lo expuesto, verbal y no verbalmente por el otro. Solo entendiendo el mapa del otro, su marco de referencia y que además, lo sienta así, habrá respuestas  y preguntas realmente potenciadoras que proporcionen confianza y honestidad en la comunicación.

La escucha profunda comienza por el respeto, teniendo presente que eso implica ir más allá de las palabras, descubrir la estructura profunda de su lenguaje y atender sus silencios, sus ideas y emociones. Es la escucha, libre de juicios y empática, la  que va a facilitar entre el docente y el estudiante el establecimiento de una comunicación que busca entender el estado presente, con el bagaje de sentimientos, desde su sistema de creencias con sus significados, para un acompañamiento efectivo por parte del docente coach hacia el estado deseado del estudiante. En consecuencia, la escucha del docente es profunda cuando acepta humildemente que no tiene toda la verdad y que necesita estar abierto a la realidad de los otros para identificar una totalidad que, en algunos casos, se diluye.

Si en todo este dinamismo de aprendizaje y crecimiento en el ámbito educativo desde el coaching, se considera como elemento esencial el feedback, se estará ampliando la capacidad de comunicar y reforzar las acciones correctas para agregar valor y las incorrectas para re-orientarlas, siempre en función del alcance de los objetivos. Así pues, el establecimiento de rapport, la escucha activa y profunda, las preguntas poderosas y el feedback son herramientas internas claves en el proceso de coaching, potenciadora de una práctica docente exitosa.

Tomando en cuenta que el coaching crea condiciones para el cambio y para ello se requiere de una comunicación precisa, específica, mesurada, serena y congruente (verbal y no verbal) y que muestre respeto, el feedback es importante, porque es toda la información que se obtiene del entorno más cercano, de las señales que envía el propio cuerpo, así como de lo que experimenta tanto el docente como el estudiante por su cuenta. Ayuda a ambos a tomar conciencia de sí mismo así como de sus actuaciones. En la medida que el proceso del feedback permee más el proceso, habrá mayor conciencia y mejor percepción de la realidad. Por ende, re-alimentar, recuperar lo aprendido y lo experimentado para fijarlo en la conciencia y potenciar la responsabilidad individual lleva a una mejora en el rendimiento personal de los estudiantes.

Así, cuando el docente como ser generador de transformación hacia el bienestar, asuma que cada  paso en este estilo del coaching  contiene una totalidad en sí mismo, y ésta a su vez supone un nuevo lenguaje, el proceso sistémico del aprendizaje será una poderosa generación de diversas formas de lograr resultados excelentes, en una amplia gama de campos de la educación, en pro de alcanzar las máximas potencialidades de él y de sus estudiantes.

El docente coaching no se centra en la adquisición del conocimiento sino en el potencial de los estudiantes para que con las herramientas que le son propias lo hagan sostenible en el tiempo Se centra en crear conciencia, es decir en facilitar que el estudiante asuma su responsabilidad personal, que se implique con compromiso, luego de reflexionar sobre sus experiencias para aprender de ellas, porque es así que se va a ser apto para resolver situaciones y por ende más libre para tomar decisiones, fijarse objetivos estableciendo estrategias y acciones factibles.

El docente coaching requiere entonces de cualidades como paciencia, escucha, imparcialidad, brindar apoyo, mostrar interés por cada uno de sus estudiantes. Eso requiere en el lado del coach un profundo cuidado, un deseo autentico de servir.
El modelo Coaching permite complementar nuestros procesos de aprendizaje incorporando la experiencia humana a través de la fusión de los aspectos internos y externos de la realidad. Tiene el poder de aproximarnos a la racionalidad sin perder el poder cognitivo de las emociones, mientras nos permite jugar con una pluralidad de perspectivas en el mejoramiento de las técnicas a utilizar para el desarrollo de competencias, y así mismo, acompañar al estudiante en el proceso de enseñanza y aprendizaje acercándolo a la complejidad infinita de la realidad.


“Yo no puedo enseñaros nada,
 sólo puedo ayudaros a buscar el conocimiento dentro de vosotros mismos,
lo cual es mucho mejor que traspasaros mi poca sabiduría”
Sócrates

lunes, 22 de junio de 2015

EXCELENTE TALLER DE HERRAMIENTAS DE ACOMPAÑAMIENTO EN COACHING

Dr. Francisco Valdivieso Arcay

Con la intervención de un nutrido grupo de participantes de diferentes Cohortes de la Certificación en Coaching y Programación Neurolingüística de la UPEL – Maracay, se desarrolló el Taller “La Caja de Herramientas de Acompañamiento en Coaching”, en el cual los nóveles Coaches pudieron experimentar 12 herramientas básicas para el acompañamiento de sesiones de Coaching Personal y Organizacional.

Durante el Taller, los participantes recibieron información detallada del alcance de cada una de las herramientas y pudieron experimentar su aplicación a través de ejemplos y simulaciones individuales y colectivas, para dimensionar sus potencialidades de utilización en diversas situaciones en las cuales los Coaches, requieren trascender a la dinámica conversacional y lograr que el o los Cocheés, salgan de la cotidianidad en un clima novedoso, con miras a agilizar y hacer más atractivo el proceso de acompañamiento.

Felicitaciones a todos los entusiastas Participantes por incorporar un nuevo eslabón en la cadena de su perfeccionamiento… 

Un Grupo de participantes Practicando los 6 Sombreros para Pensar