Bellatríx Rodríguez
Naglys Hernández
A medida que vamos desarrollando y quemando etapas en
nuestra vida, nos atrevemos en la mayoría de los casos, afirmar que la misma es
como una escultura de arcilla que se puede moldear según la imaginación, la
habilidad y el tremendo poder de creación que habita en cada escultor. Una vez
que abres la puerta de tu consciencia, es algo difícil volver a cerrarla. De
allí, sí en algún momento las circunstancias conducen hacia resultados pocos
favorables, nada efectivos y con mucho sabor a insatisfacción y estancamiento,
es primordial que se lleve a cabo una evaluación de todo un inventario de
creencias, en este caso limitadoras; que han venido controlando tu vida y como si fuese poco el control avasallante; has intentado convertirlas en “leyes” para otros.
Según la Real
Academia Española (R.A.E), “una creencia es un firme asentimiento y conformidad
con algo. Es una idea o pensamiento que se asume como verdadero…” Por lo tanto,
sí Crees que puedes hacer algo…entonces puedes hacerlo. Sí Crees que no puedes…No
podrás hacerlo.
De lo
anterior se desprende dos vertientes para la realidad de un individuo. Por un
lado, uno que conlleva al logro de metas y objetivos desde la perspectiva de
que todo cuanto se realice en la vida, será motivo de trabajo para convertirlo
en ganancia; y otro donde la percepción de los hechos, sea un obstáculo para el
desarrollo y crecimiento individual que permitan el reflejo de una mejor
versión de sí mismo.
Es en éste segundo aspecto, donde el proceso
de Coaching y su repertorio de herramientas; inducen a activar el enorme potencial que esconden las personas
y su capacidad de desarrollarlas cuando se comprometen firmemente a trabajar en
ello dentro de un ambiente de confianza y asertividad. Es decir; es en éste
segundo aspecto donde el Coaching promueve la conexión para que exista un
espacio de entendimiento seguro de las circunstancias, hechos, creencias,
capacidades, valores, deseos que conforman el Ser de un individuo en un momento
dado; y así propiciar la “creación” de mecanismos que muevan hacia el cambio
mediante la disposición plena del “Hacer”.
Es válido pensar
acerca de lo fácil o difícil que puede resultar dicho proceso. Pero lo que
realmente importa, es que llegado el momento de equiparar la cantidad de éxitos
con la cantidad de desaciertos, te das cuenta que los resultados obtenidos; no son los que
mayor satisfacción han sumado a tu vida después de tantos esfuerzos y
dedicación. En ese pequeño transito te vuelves consciente, y te asalta la idea
de considerar que es necesario dar el
paso más importante que te sacará del lugar donde ahora te encuentras para así
llevarte al lugar donde deseas estar.
Muchos son los
autores y muchos los artículos escritos en torno al tema de crecimiento personal; así como también, día a día son más las personas motivadoras que intentan influenciarnos
positivamente para que se promueva una
transformación de nuestra realidad, mediante el compartir de sus
experiencias de vida; a través de los diversos medios de comunicación (tv, radio, prensa, revistas, redes sociales,
teatro, etc.). Sus estilos y filosofías son puntos relevantes de inspiración
que buscan ser destellos de luz que iluminen de alguna manera ese lado oscuro
que todo individuo trae consigo. De una forma u otra buscan cambiar la
percepción de lo que sucede, e invitan a conocer un nuevo mundo que puedes
empezar a crear con la evolución de un nuevo “YO”.
En repetidas oportunidades, escuché de
alguien una frase que literalmente expresa la siguiente reflexión:
“Cuando cambias la forma de ver las cosas…las cosas empiezan a cambiar de
forma…” En un principio, la
frase se puede percibir como un juego de
palabras que no guarda mucho en su esencia; pero al buscar mayor profundidad en
la misma, es interesante entender cómo encaja perfectamente en la explicación que; es posible que al empezar a ver con otro cristal las
circunstancias o tratar de entender lo ocurrido desde un punto de vista más
flexible; las decisiones a tomar y sus resultados no serán tan radicales. Se
busca fijar la idea de que las cosas pueden fluir de manera positiva, trayendo satisfacción en
cualquier ámbito de acción personal y profesional. Si cambias tus creencias y
creas una mejor actitud, verás que cambiará todo a tu alrededor. Seamos capaces
de cambiar el dicho tradicional “Ver para Creer” por…”Crear para Ver”.
Es importante que empieces a considerar: Lo
que tu mente puede “creer; tu poder de creación lo materializará”.
Por supuesto que la cosa no es tan fácil,
pero tampoco podemos tildar como imposible desafiar lo que ha sido como “la piel de nuestro cuerpo”
durante todos estos años de vida; dado que fue el entorno familiar,
socio-cultural y la educación que recibimos en la
infancia lo que condicionó sin duda, la forma de pensar que tenemos hoy. Las
creencias dirigen los pensamientos y por tanto tienen la capacidad intrínseca
de condicionarnos. Sí creemos
en nuestras creencias limitantes, éstas determinaran
nuestra vida. Por lo tanto, Identificarlas y decidir transformarlas en potenciadoras es algo en lo
que se debe trabajar continuamente. No basta con darse cuenta que existen y
sentir que paralizan; es necesario
empoderarse de toda una gama de herramientas que conduzcan a la creación de una
nueva realidad.
Analizando lo anterior, podemos decir
entonces, que sí las creencias dirigen
los pensamientos, es lógico creer y pensar que
así como existe lo bueno, también existe lo malo; así como existe la
claridad, también existe la oscuridad; así como han existido creencia
limitantes, también existe la posibilidad de cambiarlas en beneficio de una transformación
que lleve a la obtención de grandes resultados
que se traduzca en una ¡Realidad de Éxitos!
Todo
ser humano posee un gran potencial de capacidades y aptitudes para reponerse a
situaciones adversas tanto emocional como físicamente; lo que conocemos de
cierta manera en algunas disciplinas como Resiliencia. Pero lamentablemente,
interactuamos dentro de una cultura donde un considerable grupo de personas,
optan por ser víctimas con un papel principal y protagónico, donde el drama es
la mejor actuación. De allí una baja autoestima, sus emociones cambiantes pero
en el matiz de lo grisáceo, sin motivación al logro y con amplio conformismo
por lo poco que se esfuerzan, sin sueños ni deseos grandiosos porque “tienen
solo lo que se merecen”…En fin, sus vidas están desahuciada desde ese mismo
momento, en el que decidieron quedarse en un pasado anecdótico y pesimista,
porque nada de lo que hagan cambiará su presente y su destino. Mucho menos descubrirán
por sí solos, ese gran poder de creación,
que como don se le han otorgado mediante obra natural y Divina.
“Una
autoimagen fuerte y positiva es la mejor preparación posible para el éxito”.
Joyce Brothers
Nada más poderoso para cambiar de
actitud, es el trabajar en uno mismo. Si
ya tu realidad no te gusta entonces empieza por cambiar tus pensamientos. Rodéate
de personas proactivas, que sumen energías positivas a tu nivel vibratorio.
Crea el hábito de hacer presencia plena en ti y reconócete en cada milagro en
el que puedes estar. Permite el Re-nacer de ese Ser maravilloso que trabaja constante y con
convicción en sí mismo, para lograr verdaderos cambios. Crea tu propia imagen
de una persona exitosa, Cree en tus propios éxitos, Actúa siempre sintiendo la
pasión y el amor por lo que te hace sentir exitoso… ¡VIVE UNA REALIDAD DE EXITOS que tú
mismo “puedes Crear”!
“El
mundo es lo que creemos que es…Si cambiamos nuestros pensamientos, podemos
cambiar el mundo”
H.M.Tomlinson
Al inicio de éste articulo, se comenta que la
vida es como una escultura de arcilla que se puede moldear según la
imaginación, la habilidad y el tremendo poder de creación que habita en cada
escultor. Se ha intentado plasmar en el desarrollo del mismo, que aun cuando
los hechos son inalterables para todos; las realidad es propia de quien la vive
según sea su percepción…Tu eres el Escultor de tu Realidad…Tu eres quien puede
Crearla…Abre los ventanales para que un nuevo aire refresque tu vida. No te
quedes en el deseo y la aspiración cuando en éste presente, tienes a tu
disposición inmensas posibilidades de Re-diseñar lo que hasta ahora proyectaste pero no materializaste.
Trabaja arduamente en la “arcilla” y que su
textura te permita moldear una imagen nueva de la mejor versión de ti mismo.
Este es el mejor momento porque es tu “Hoy”. Todo está preparado y listo
esperando por el ingenioso “escultor”.
Lo demás es pasado, y desde ya puedes iniciar un nuevo capítulo que para
tu historia; sea recordada con una nostalgia bonita. Activa ese gran poder creador y
diseña un repertorio de creencias que suplanten las que no dieron frutos dulces
a tu vida… ¿Qué te parece si empiezas por reconocerte?... ¿Qué tal si
empiezas a reconocer tu “Yo”?... “Yo me reconozco como un Ser de Luz y Amor”…”Yo
me reconozco como un Ser de grandes potencialidades y virtudes”…”Yo me
reconozco como un Ser que Crea su propia Realidad de bienestar”…”Yo me
reconozco como un Ser Feliz”…”Yo me reconozco como el mejor Ser que habita en
mi”…”Yo
me reconozco como el Escultor de mis propios Éxitos”.
¡MANOS
A TU ESCULTURA…Eres lo que Creas!
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